30 de Enero de 2017- Lunes

Yo soy la luz crística en expresión; nada puede perturbar la paz de mi alma.

Consuelo
Las enseñanzas de Jesús son verdades eternas que me ayudan en el camino de la vida, así que determino vivir de acuerdo a su ejemplo. Reconocer que comparto la misma cualidad espiritual –la mente crística– me consuela. Logro una conciencia espiritual elevada cuando celebro mi divinidad: mi “yo soy”, la presencia de Dios en mí. Inspirado por mi señalador del camino, recibo consuelo y brindo consuelo a los demás. Mi vida refleja la paz serena del espíritu en todo lo que pienso, digo y hago. Una sensación de consuelo se extiende por todo mi ser. Mi alma se regocija a medida que una serenidad sagrada trasciende toda emoción. ¡Yo soy la luz crística en expresión!

Efesios 3:16
Pido al Padre que de su gloriosa riqueza les dé a ustedes, interiormente, poder y fuerza por medio del Espíritu de Dios.