16 de Septiembre de 2017-Sabado

Digo sí al llamado del Espíritu.

Fe
Cuando tengo que tomar decisiones rápidas con poco tiempo para prepararme o investigar, la fe me recuerda dónde deben estar mis expectativas. Mi fe me da un empujoncito para que me dirija a mi interior, para estar quieto y saber. El fluir divino está siempre presente, y en este momento digo sí al llamado del Espíritu en todas las áreas de mi vida. Reconozco y me doy cuenta de que el poder de Dios en mí manifiesta el deseo de mi corazón. Alinear mi fe con mis acciones diarias mantiene mi atención centrada y firme en mi camino a medida que avanzo. Aun cuando no sepa cómo resultarán las cosas, afirmo: ¡Para Dios no hay nada imposible! Al continuar el viaje de mi vida, mi camino es iluminado ante mí. Digo sí al llamado del Espíritu.

Lucas 1:37
¡Para Dios no hay nada imposible!