22 de Noviembre de 2017- Miercoles

YO SOY UN BUEN GUARDA DE LA ABUNDANCIA DIVINA. DOY Y RECIBO CON GRATITUD.

Mi herencia divina contiene bendiciones ilimitadas. Con gran gozo y gratitud acepto que yo soy heredero del reino en mí. Aparto cualquier pensamiento de escasez o limitación, porque el bien de Dios es ilimitado e inagotable.

Doy gracias por los dones de Dios de salud, amor y sabiduría, aceptándolos como herramientas para una vida próspera. Utilizo sabiamente, y comparto con los demás, las bendiciones abundantes que recibo. Con fe, sé que el dar crea un espacio que será llenado rápida y amorosamente por mi Creador.

Cualquiera que sea mi necesidad, sé que será satisfecha porque yo soy un buen guarda de la abundancia divina. Doy y recibo con gratitud.

Mateo 6:26 Miren las aves del cielo, que no siembran, ni cosechan, ni recogen en graneros, y el Padre celestial las alimenta.