4 de Junio del 2012 - Lunes

Unidad

Soy uno con todo lo que existe.

Cuando me miro al espejo veo mi rostro, mi cuerpo y los límites externos de mi cuerpo. Luego cierro los ojos y me imagino sentado solo a la orilla del océano. Allí, en un estado de paz, siento que todo aquello que me separa de todo lo que existe a mi alrededor se desvanece en la nada.

Soy una célula en el cuerpo del universo, un corazón latiendo con el ritmo de la vida única. Mi aliento se une con la brisa que mueve las hojas y que hace olas en el mar. Mi espíritu se eleva con alas de águila. En Espíritu, soy uno con el poder divino y la vida eterna. Gracias a que soy una creación de Dios, soy uno con toda vida. Estoy en paz. Cuando soy uno con todo lo que existe, soy más de quien creo ser.

Alza tus ojos alrededor, y mira: todos estos se han reunido, han venido a ti.—Isaías 49:10