02 de Agosto de 2019-Viernes

Prosperidad

COMPARTO MI ABUNDANCIA CON LOS DEMÁS GOZOSAMENTE.

He sido creado como un reflejo de Dios, por ende, ya tengo todo lo que pueda necesitar o desear. Yo soy próspero porque soy uno con el Espíritu que me dio vida, la fuente infinita de todo lo que existe. Cuando alineo mi mente con esta Verdad, me sé próspero y encuentro gozo al compartir mi bien con los demás.

Para asegurarme de que tenga siempre mucho para dar, cuido de mis necesidades físicas, mentales y espirituales. De ese modo, no me agoto y puedo compartir de mi abundancia plenamente. Aprecio y sustento los dones que Dios me ha dado para que crezcan. Mi copa se rebosa, y siempre tengo mucho que disfrutar y compartir con los demás.

Salmo 23:5 Me preparas un banquete a la vista de mis adversarios; derramas perfume sobre mi cabeza y me colmas de bendiciones.—