07 de Agosto de2019- Miercoles

Dejar ir

Dejo ir lo que no promueve mi bienestar y estoy receptivo al bien abundante.

De tiempo en tiempo, puede que revise mi closet y me deshaga de ropa que ya no me pongo o que ya no me atrae. Al donarla para el beneficio de otro, hago espacio para la nueva.

Otras áreas de mi vida también se benefician de este proceso de dejar ir. Realizo una limpieza espiritual cuando reflexiono acerca de lo que funciona en mi vida y lo que no. Elijo dejar ir ideas, prácticas y hábitos que no fomentan mi bienestar. Este acto de dejar ir abre mi mente a las ideas divinas que me elevan y prosperan.

Al tener presente que mis pensamientos dan forma a mi vida, permanezco receptivo al fluir continuo de ideas positivas y prósperas. Dejo ir y recibo conscientemente.

Mateo 18:18 Todo lo que ates en la tierra será atado en los cielos, y todo lo que desates en la tierra será desatado en los cielos.—