21 de abril del 2012 - Sabado

Entusiasmo

Recibo el día de hoy con entusiasmo.

Observar a los niños jugar con felicidad y sin preocupaciones me brinda gran gozo. Ellos viven en el momento y disfrutan todo que ven y oyen en su mundo. Yo también puedo vivir en el momento. Cuando recuerdo que cada momento es un momento divino, siento ese mismo entusiasmo y gozo por la vida. Disfruto de cada cosa que veo y oigo, cada sabor y aroma, cada relación personal y cada experiencia con una conciencia nueva, con nuevo aprecio.

Siento nuevo entusiasmo por la vida, nuevo deseo de experimentar las bendiciones de Dios en toda su gloria. Recibo el día de hoy con entusiasmo y doy gracias por los momentos divinos que vienen a mí, sabiendo que llenan mi vida de gozo.

Alegraos en Jehová y gozaos, justos; ¡cantad con júbilo todos vosotros los rectos de corazón!—Salmo 32:11