31 de Mayo de 2014- Sabado

Cuando damos amor, recibimos amor.

Unidad
Somos seres sociales y nuestras vidas son enriquecidas cuando nos reunimos para vivir y trabajar, jugar y celebrar, adorar y compartir. Reconozco y aprecio a las personas con quienes comparto mi vida, y lo demuestro.

Soy rápido para dar una mano. Cuando estoy con otras personas, les ofrezco toda mi atención. Estoy presente y disponible. Escucho y comparto. Si amigos o seres queridos se han distanciado, los contacto y les comunico que están en mi corazón y en mis pensamientos. Esto nunca falla cuando damos amor, este regresa a nosotros de manera inconmensurable. Demuestro amor y estimo a todas las personas en mi vida.

Hechos 2:46
“Todos los días se reunían en el templo, y en las casas partían el pan y comían juntos con alegría y sencillez de corazón”.