23 de Septiembre de 2014- Martes
Cada experiencia es mi maestra. Estoy receptivo a aprender.
Experiencia
A veces puede que olvide quién soy, que tengo acceso inmediato a la inteligencia divina o que soy uno con el amor divino. En esos momentos, quizás me sienta confundido o frustrado, mas sé que esto forma parte de mi experiencia humana.
Cada vez que olvido quién soy, acepto la oportunidad de recordarlo de nuevo. Abro mi mente y mi corazón, y presto atención a la sabiduría copiosa del universo. Quizás una pausa fervorosa o una conversación con un amigo me recuerde mi naturaleza divina. Lo más importante es que permanezco receptivo y dispuesto a aprender.
Veo mis experiencias de vida como oportunidades continuas para recordar que nunca estoy separado del reino de Dios.
Proverbios 2:10
“Pues tu mente obtendrá sabiduría y probarás la dulzura del saber”.