20 de Abril de 2015- Lunes
Siento consuelo y estoy en paz.
Consuelo
Tal vez sienta ansiedad o temor por las circunstancias de mi vida. Puede que un familiar esté en el hospital. Quizás tenga problemas financieros o de relaciones personales. Si dejo que mi imaginación se acelere, la preocupación aumenta.
En vez de ello, recuerdo que el amor de Dios está solo a un pensamiento de distancia. Si comienzo a pensar en el problema, cambio inmediatamente mis pensamientos y recuerdo mi fe en Dios.
Digo: “La Oración de Protección”: “La luz de Dios me rodea; el amor de Dios me envuelve; el poder de Dios me protege; la presencia de Dios vela por mí. Dondequiera que estoy, ¡está Dios!” Esta oración me brinda consuelo y paz.
Isaías 66:13
“Como una madre consuela a su hijo, así los consolare yo a ustedes”.