7 de Mayo de 2015- Jueves
Creo en mi propio gozo.
Gozo
Mis seres queridos llenan mi corazón, la naturaleza me ofrece sus bendiciones y las oportunidades para compartir mi alegría abundan. ¡Mi vida está llena de gozo! Sentir gozo es una elección. Sé que mis pensamientos afectan mis sentimientos, de manera que si estoy experimentando ira o temor, tomo un momento para reflexionar por qué me siento de esa manera.
Puedo ver a una persona o situación desde un punto de vista nuevo y positivo. Al hacerlo, cambio mis sentimientos de adversos y destructivos a gozosos y constructivos. Busco y encuentro razones para sentir gozo. Al elegir ser feliz, otros perciben mi dicha. Un corazón alegre es contagioso. Esparzo gozo, la actividad amorosa de Dios en mí.
Isaías 35:10
“Siempre vivirán alegres. Hallarán felicidad y dicha, y desaparecerán el llanto y el dolor”.