02 de Septiembre de 2015 - Miercoles
Recuperación
Mi fe en el poder restaurador y edificador del Espíritu en mí, me pone en contacto con dicho poder. Mi fe me fortalece y me da la capacidad para superar desafíos y tomar decisiones que benefician mi vida.
Gracias al poder y la presencia de Dios, tengo la habilidad para recobrarme de retos de salud, dificultades financieras o hábitos dañinos.
No me amedrento ante los desafíos de la vida; por el contrario, les doy la bienvenida a las bendiciones que la vida me ofrece a través de todo. Tomo decisiones que me permiten vivir más saludable y felizmente.
Soy un vencedor que avanza con valor. Al hacerlo, veo que mi mundo se expande y siento esperanza por el mañana.
1 Crónicas 28:20. 20 Dijo además David a Salomón su hijo: Anímate y esfuérzate, y manos a la obra; no temas, ni desmayes, porque Jehová Dios, mi Dios, estará contigo; él no te dejará ni te desamparará, hasta que acabes toda la obra para el servicio de la casa de Jehová