03 de Octubre de 2015- Sabado
El gozo irradia de mí.
Gozo
El don espiritual del gozo es como una vela que arde en mi corazón. Así como cada amanecer ilumina la tierra con tonos cálidos, el gozo me ilumina de adentro hacia afuera. Los paisajes, sonidos y personas a mi alrededor fomentan mi conciencia de alegría: mi canción favorita, la belleza de la naturaleza, un niño que baila, el cálido abrazo enciende una chispa jubilosa en mí. En momentos de reflexión, la alegría en mi corazón aumenta. Siento que su calidez fluye por todo mi ser. Dios está presente en mi júbilo y siento gratitud. (F)
Juan 15:11 Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido.