23 de Diciembre de 2015- Miercoles
Abro mi corazón para recibir milagros.
Milagro
Cuando el ángel Gabriel visitó a María para darle la noticia de que pronto tendría un niño, ella debe haber experimentado un gran asombro e impacto según absorbía el mensaje del ángel. María debe haber invocado su guía interna en esos momentos de anticipación llenos de incertidumbre y gozo ante el cumplimiento del mensaje del ángel Gabriel.
En mi vida también suceden cosas sorprendentes que pueden dejarme en un estado similar de emociones encontradas. Cuando me doy cuenta de que algo más grande que mis sueños más osados se manifiesta en mi vida, sigo el ejemplo de María y respondo con gratitud, humildad y fe. Mi corazón está abierto y receptivo para recibir milagros.
Lucas 1:37-38
Pues nada hay imposible para Dios. Entonces María dijo: "Aquí está la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra"