08 de Marzo de 2016- Martes
Yo soy libre y no tengo edad
Sin edad
Así como el otoño da paso al invierno y este a la primavera, experimento cambios en mi vida que pueden influir la manera como percibo a los demás y a mí mismo. Sin embargo, no existe un cambio en mi edad o en mi vida que pueda alterar la verdad: gracias al espíritu de Dios en mí, no tengo edad y estoy libre de limitaciones.
Soy una expresión viviente del amor y la vida de Dios. Ya sea joven físicamente o joven de espíritu, recibo con alegría cada momento como una oportunidad para encontrar nuevas maneras de expresar mi naturaleza divina.
El amor de Dios en mí me apoya y me inspira a vivir gozosamente. Nazco de nuevo cada día. Estoy listo para seguir donde el Espíritu me guíe. No tengo edad y soy libre.
Daniel 2:20
Sea bendito el nombre de Dios, porque suyos son el poder y la sabiduría