16 de Noviembre de 2016 Miercoles
Te bendigo, sabiendo que el poder del amor divino obra en tu vida.
Orar por otros
Cuando una situación o el comportamiento de otra persona me preocupa, ¿qué puedo hacer? Puedo orar. Cuando oro por un ser querido, un amigo o hasta por alguien que conozco por medio de las noticias o en las redes sociales, doy el regalo del amor. Bien sea que conozca a la persona o no, sé que estamos vinculados porque el amor de Dios es la esencia de nuestro ser. Todos somos uno en espíritu, uno en amor.
Al orar por alguien, siento nuestro vínculo divino según afirmo la bondad de Dios. Abro mi mente y corazón al amor divino. Permito que este fluya de mí y afirmo que las bendiciones deseadas ya están en camino.
Doy gracias a Dios por el poder del amor que obra en toda manifestación de vida.
1 Corintios 16:14
“Y todo lo que hagan, háganlo con amor”.