18 de Mayo de 2017 - Jueves
Dios es mi ayuda en toda necesidad.
Nunca solo
En cualquier momento, puedo suscitar pensamientos serenos haciendo una pausa y utilizando mi respiración. Al inhalar, digo: Nunca estoy separado de Dios. Dios es mi ayuda en toda necesidad. Al exhalar, suelto el aire lenta y sosegadamente, liberando el estrés de mi cuerpo. Entrego cualquier perspectiva limitada a Dios.
La oración es un vínculo divino que me permite superar cualquier desafío. Saber que Dios siempre está conmigo me permite avanzar con mayor seguridad y determinación. Cualquier nube se disipa. Los sentimientos de preocupación comienzan a desaparecer y mi corazón se llena de gratitud.
Siento consuelo cuando recuerdo que Dios es mi ayuda en toda necesidad.
Juan 16:32
No estoy solo, porque el Padre está conmigo