11 de Diciembre de 2017- Lunes
Al reflexionar acerca de mis amigos y seres queridos, aprecio su apoyo y cariño. Cada relación personal me ofrece la oportunidad de iluminar la vida de alguien, sea por un instante o por toda una vida.
Cultivo cada relación personal en mi vida consciente de su naturaleza sagrada. Estoy dispuesto a hacer que mi luz crística resplandezca para bendecir la experiencia de alguien. Busco oportunidades para compartir gozo. Valoro la expresión única de Dios que cada persona es, y veo partes de mí reflejadas en los demás.
Cada relación personal encierra la posibilidad de evolución espiritual, cuando me permito apreciarla y respetarla. Al reconocer el vínculo sagrado que comparto con todos, crezco espiritualmente.
Filipenses 2:5 Que haya en ustedes el mismo sentir que hubo en Cristo Jesús