25 de Febrero de 2021- Jueves
Guía
YO SOY GUIADO AL ABRIRME A LA DIVINIDAD QUE MORA EN MÍ.
Orar por guía me consuela cuando el sendero ante mí no es claro. Mas para recibir la guía por la cual oro, debo primero abrirme para recibirla. La necesidad de guía puede causarme intranquilidad mientras busco respuestas o trato de determinar mis próximos pasos. En esos momentos cuando no sé qué dirección tomar, acudo a mi interior.
Aquieto mi mente, respiro profundamente y recurro a la sabiduría de mi corazón. Mi respiración se desacelera y se profundiza. En la quietud, escucho. Al retornar a mis actividades diarias, me siento confiado en que la sabiduría del Dios que mora en mí me está guiando, alumbrando mi camino. Yo soy bendecido por caminar bajo esa luz.
Y si te desvías a la derecha o a la izquierda, oirás una voz detrás de ti, que te dirá: “Por aquí es el camino, vayan por aquí”.—Isaías 30:21