Mi vida se expande cada vez que extiendo mi corazón, mi mano o mi conciencia hacia nuevas direcciones que aumenten mi crecimiento. Cuando me abro a nuevas experiencias enriquezco mi vida y mi conciencia evoluciona.

Ya sea haciendo nuevos amigos o visitando lugares desconocidos, la vida es más rica cuando me atrevo a llevarla por nuevas direcciones. Centro mi conciencia en el Espíritu y encuentro mi camino. Me pregunto a qué lugares seré llamado y cómo podría ayudar. Al saber que soy guiado e inspirado por la divinidad, tengo fe de que encontraré las circunstancias perfectas para que mi vida florezca hasta su máxima expresión. Estoy deseoso de descubrir qué aventuras emocionantes me esperan.