Rinitis Alérgica
Inflamación de la mucosa nasal que produce estornudos, picazón, obstrucción, secreción nasal acuosa y más espesa, y en ocasiones (anosmia) falta de olfato. Es la enfermedad alérgica más frecuente del mundo y a pesar de no ser una enfermedad grave, puede alterar la calidad de vida de quienes la padecen.
Causas
No siempre que se habla de rinitis se trata de una patología inflamatoria ya que la mucosa nasal tiene una gran cantidad de vasos sanguíneos y por ello cuando estos se dilatan puede producir cuadros de obstrucción nasal, semejantes a una rinitis pero sin otros síntomas (estornudos, picazón, etc.). Dependiendo de esta diferencia y de las características en las causas pueden diferenciarse varios tipos de rinitis.
Rinitis inflamatorias: Presentan síntomas de picor, estornudos, secreciones, obstrucción. Entre ellas están:
Rinitis alérgica - Continua: puede ser causada por ácaros, hongos, epitelios de animales. - Aperiódica: puede ser causada por hongos, epitelios de animales, profesional. - Estacional: puede ser causada por el polen de gramíneas, de pino, etc.
Rinitis no inflamatorias: Causadas por alteraciones del contenido de los vasos sanguíneos y que solo cursan con obstrucción como síntoma característico.
- Vasomotora: En general es de causa desconocida o por el uso habitual de medicamentos vasoconstrictores tópicos nasales.
- Hormonal: Secundaria a hipertiroidismo, embarazo.
- Por medicamentos: secundaria a la toma de antihipertensivos, progesterona, alcohol, vitamina A
- Física: Aparece por aumento del frío ó humedad ambiental, por la polución
- Mecánica causada por cuerpos extraños, tabique desviado, tumores, o las vegetaciones.
Diagnóstico
El diagnóstico tiene como objetivo definir los síntomas y su época de aparición, su duración, su frecuencia y sus posibles desencadenantes. Se utiliza la rinoscopia anterior, que mediante un aparato (rinoscopio), se ve la mucosa nasal y se aprecian diferencias de coloración y de aumento del tamaño de los cornetes o la presencia de pólipos.
Las pruebas cutáneas con alergenos (ácaros del polvo doméstico, pólenes, epitelios) ofrecen información de las posibles causas.
La intensidad de la rinitis se puede medir mediante la obtención de las presiones de paso del aire a través de la nariz mediante la medición del pico inspiratorio nasal o la rinomanometría.
Como exploraciones complementarias, que dan información sobre complicaciones de sinusitis se puede utilizar la radiografía de senos paranasales.
Tratamiento
Por un lado se deben tomar medidas de control ambiental para evitar las causas de origen alérgico.
Para la alergia a ácaros se debe realizar una limpieza intensa de la casa con aumento de la ventilación, disminución de la humedad ambiental y los acarizidas son las medidas de control ambiental adecuadas. En la alergia al polen se evitar salidas al campo en días con sol y viento. En la alergia a epitelios se utilizan líquidos desnaturalizadores de proteínas que se aplican en el mobiliario o en el propio animal.
Como medicamentos se utilizan los antihistamínicos vía oral o tópicos nasales para evitar la picazón, las secreciones acuosas y los estornudos. Si la rinitis es más crónica los esteroides tópicos mejoran la obstrucción. Si el desencadenante de alergia es concreto se realiza una inmunoterapia durante 2 a 6 años. La inmunoterapia a ácaros y pólenes es muy efectiva en la mayor parte de los casos.
Complicaciones
En el adulto la complicación principal es la asociación de sinusitis polipoidea, apnea del sueño, obstrucción de la trompa de Eustaquio y otitis.
En los niños la mala respiración puede producir alteraciones del sueño y deformidades en la dentición con la consiguiente necesidad de corrección por el odontólogo.
Fuente : Internet