¿ Cistitis ?

La cistitis es una infección de las vías urinarias que puede tener su origen en bacterias, sobre todo por la Escherichia Coli. Es frecuente que la primera vez que se sufre de cistitis sea depués de mantener relaciones sexuales; esto es debido quizás, a la falta de lubrificación de la vagina.

Síntomas

Hay muchas mujeres que sufren de dolores y malestar al orinar, que puede se causados por una infección típicamente femenina que puede tratarse de una forma muy efectiva con antibióticos, aunque siempre es mejor la prevención.

Los principales síntomas de esta infección suelen ser muchas ganas de orinar y con mucha frecuencia, sobre todo por la noche.
    
Se notan molestias al orinar que pueden ir acompañados de una pequeña molestia a un fuerte ardor, se suele notar en la zona más alta del pubis y en la parte baja de la espalda.

Aunque no sucede siempre, una tercera parte de las mujeres que padecen esta infección, advierten la aparición de sangre en la orina, o que la orina está muy turbia.

Diagnóstico

Normalmente se dan todos los síntomas descritos anteriormente, pero al acudir al médico, éste se puede asegurar con un análisis de orina en los que pedirá dos pruebas un urocultivo y un antibiograma.

El urocultivo es para ver qué cantidad de gérmenes existen en la orina y el antibiograma determina la sensibilidad de esos gérmenes a algunos antibióticos.
    
El resultado de estas pruebas, si efectivamente se padece una cistitis, es que aparecen un número muy alto de bacterias en la orina.

¿ Por qué la padecen más las mujeres ?

Una explicación clara tiene relación con la anatomía del aparato urogenital de la mujer, la uretra de las mujeres es mucho más corta que la de los hombres y la vagina está muy cercana al ano con lo cual es fácil que las bacterias que se alojan en el intestino grueso y que producen las infecciones puedan pasar a ésta fácilmente.

Prevención de la enfermedad

- Lo más eficaz es tomar mucho líquido o comer verduras y frutas que contengan mucha agua, de esta forma se orina al menos un litro y medio al día. El agua es fundamental pero también puede tomarse leche, jugos o infusiones.

- Hay que mantener una higiene estricta de la zona y limpiarse de una forma determinada, es decir, cuando se termine de defecar el movimiento para limpiarse debe ir de delante hacia atrás para evitar que lleguen restos de gérmenes de la materia fecal a la vagina y si es posible, después de cada defecación lavar bien la zona con agua y jabón.

- No hay que llevar mucho tiempo ropa mojada y si va a una piscina o a la playa es conveniente cambiarse de ropa después de haberse secado perfectamente. Es recomendable utilizar ropa interior de tejidos naturales como el algodón ya que los sintéticos no dejan transpirar.

- Es muy importante ir al baño siempre que se sientan ganas de orinar, nunca aguante la orina.

Fuente : Mujeractual.com