Aterosclerosis en la infancia

Tambien llamada arteriosclerosis consiste en un endurecimiento de las arterias relacionado con factores dietéticos (especialmente dietas ricas en colesterol y grasas saturadas), peso excesivo,obesidad y factores genético-familiares. Suele iniciarse en la infancia.

La arterioesclerosis o aterosclerosis es una esclerosis o endurecimiento de las arterias que sucede en todos los individuos y que va progresando conforme avanza la edad. La aterosclerosis es la consecuencia del depósito en las arterias de productos lipídicos y este fenómeno se inicia en los primeros años de vida. Lógicamente, una mayor aterosclerosis en la infancia puede complicar aún mucho más una aterosclerosis en la edad adulta, determinando que su aparición sea más precoz, afirman los especialistas.

Cuando comienza

El proceso de arteriosclerosis comienza precozmente en la infancia y va progresando hasta la vida adulta. Se han observado estrías grasas en la aorta y arterias coronarias; estos hallazgos están presentes en más del 50% de los niños con edades comprendidas entre los 10 y 14 años.

El aumento de los valores plasmáticos de colesterol, factores dietéticos (especialmente dietas ricas en colesterol y ácidos grasos ), peso excesivo/obesidad y factores genético-familiares.

Entre los factores que se comportan como agravantes se encuentran el tabaco, el alcohol, la ingesta excesiva de sal, el estrés, la hipertensión, hábitos sedentarios, falta de práctica deportiva, etc.

Prevención

Para efectuar una educación sanitaria respecto a la reducción de factores de riesgo en poblaciones ya seleccionadas pero diferentes en cuanto al pronóstico, es necesario tener en cuenta las siguientes consideraciones:

-Alimentación.

Orientación hacia hábitos y costumbres alimenticias correctas en el seno de la familia en particular y la población general. Evitar carnes muy grasas, limitar embutidos, huevos, exceso de lácteos; consumir obligatoriamente fruta, verdura, pescado, aceite de oliva. El niño es un gran imitador. Probablemente, lo que coma de niño también lo hará de mayor, afirman los especialistas.

-Medidas preventivas especialmente en sus primeros años de vida.

La resistencia al cambio de hátitos puede ser muy importante. Hay que destacar la importancia del comportamiento alimenticio, acción sobre su estilo de vida en lo que a actividad deportiva se refiere, evitar la obesidad y el sedentarismo, campaña precoz de disuasión del inicio del tabaquismo, etc.

-No se deben pretender cambios iniciales importantes pero fugaces.

Es un problema a largo plazo. En apariencia, el niño está asintomático a pesar del estilo de vida, ya que el lento y progresivo daño arterial, no dará la cara hasta varias décadas después, aunque casi siempre lo hará de forma severa y limitante.

-La intensidad de la actuación frente a la hipercolesterolemia va depender del grado de riesgo.

La acción debe ser a nivel individual con especial atención a familias con alteraciones genéticas del metabolismo lipídico, familias con diabetes, familias en las que la enfermedad coronaria aparece de forma precoz.

Consulte a un especialista.