¿ Por qué la cirugía plástica ocular?
Se realiza a nivel de la frente y los párpados buscando atenuar las arrugas, resecando los excesos de piel, grasa y reposicionando las cejas y los párpados devolviendo al paciente una mejor apariencia. Los procedimientos que se llevan a cabo se conocen como:
La cirugía plástica ocular ha sido parte del desarrollo de la oftalmología desde sus comienzos como especialidad. Ha tenido grandes maestros que con su conocimiento han investigado y desarrollado las técnicas quirúrgicas que hoy en día aplicamos en este campo.
Blefaroplástia:
Cirugía para remover los excesos de piel y grasa de los párpados. La técnica quirúrgica puede ser vía piel a través de los pliegues del párpado o vía transconjuntival sin dejar evidencia de incisión:
Existen dos grandes divisiones a tener en cuenta, la cirugía estética y la reconstructiva.
La cirugía estética está dirigida para ofrecer belleza, rejuvenecimiento, armonía e integridad en todos los aspectos relacionados con las estructuras alrededor de los ojos.
La cirugía reconstructiva como su nombre lo indica se lleva acabo con fines de corregir defectos congénitos o adquiridos, ofreciendo mejorar o solucionar tales alteraciones.
Campo muy amplio alrededor de los ojos, involucra el área de la frente, los párpados, las pestañas, la vía lagrimal y la órbita.
Toda esta área desarrollada por la oftalmología creó la subespecialidad en cirugía plástica ocular para brindarle a la comunidad un manejo de alta calidad por médicos oftalmólogos subespecializados en ésta área.
La frontoplástia:
Es empleado con el fin de corregir líneas de expresión y atenuar las arrugas de la frente, elevar la cejas y mejorar la expresión en los párpados. Para éste procedimiento se emplea una técnica endoscópica, con abordaje a través de 3 pequeñas incisiones a nivel del cuero cabelludo, que garantizan ausencia de cicatrices y rápida convalecencia.
Cirugía Reconstructiva
Tenemos infinidad de alteraciones en los tejidos que circundan el ojo para lo cual se han desarrollado protocolos de manejo.
Los párpados presentan patologías como:
Ptosis palpebral:
(Caída del Párpado), que puede tener origen congénito o adquirido. Su enfoque de manejo varia de acuerdo a la edad de aparición. La técnica quirúrgica más empleada busca acortar el músculo elevador responsable de la caída del párpado.
Entropión
Rotación del borde libre del párpado hacia adentro generando un contacto permanente de las pestañas con el globo ocular. Se caracteriza por ser un ojo congestivo con permanente lagrimeo y sensible a la luz.
De las técnicas quirúrgicas, la más reconocida es la fijación de los retractores inferiores a la placa tarsal (técnica de los párpados inferiores que se asemeja a la empleada en los párpados superiores para corregir la ptosis.
Ectropión:
Rotación del borde libre del párpado hacia delante, generando un párpado engrosado e irritado.
Se asocia a la laxitud de los tejidos por lo que la técnica quirúrgica esta encaminada a acortar el párpado inferior.
Triquiasis y Distriquiasis:
Corresponde al mal posicionamiento o crecimiento anormal de las pestañas. Su tratamiento puede llevarse a cabo con láser, el cual produce una ablación de la raíz de la pestaña sin alterar el párpado.
Lesiones palpebrales:
Estas pueden tener un origen benigno o maligno, de ahí la importancia de consultar tempranamente.
1. Lesiones benignas
Lesiones benignas generan alteraciones en la superficie anterior o en el borde libre de los párpados que pueden ser tratados con excisión simple o laser.
2.Lesiones malignas
Toda lesión pigmentada, ulcerada, irregular de los párpados que presente aumento en el tamaño debe ser resecada completamente y enviada al laboratorio de patología para ser analizada.
Vía lagrimal:
Esta conformada por el sistema excretor y secretor.
El sistema secretor es el responsable de la producción de la lagrima, localizada en la glándula lagrimal ubicada en el extremo lateral superior de la órbita.
El sistema excretor corresponde a la vía de drenaje de la película lagrimal, y consta del punto lagrimal, canalículo, saco y conducto nasolagrimal.
Un síntoma frecuente de consulta es el lagrimeo constante que puede deberse a una obstrucción de la vía lagrimal.
Su estudio se inicia con una historia clínica, irrigaciones y estudio gamagráfico.
Si los resultados señalan que hay evidencia de obstrucción, el paso a seguir es un procedimiento quirúrgico conocido como: DOCRIOCISTORRINOSTOMIA (DCR) e incubación.
La DCR tiene como objetivo crear una salida espontánea de la película lagrimal hacia la nariz, técnica que puede llevarse a cabo por un abordaje vía piel o endoscopía vía nasal.
El éxito quirúrgico alcanza un 85% - 90% en manos expertas.