Ginecomastia

Son múltiples las causas capaces de desarrollar un cuadro de ginecomastia. Puede ser normal que aparezca en ciertas etapas de la vida, como la etapa neonatal, pubertad y la ancianidad. La que aparece en la pubertad es muy común, afectando entre el 25 y 50% de estos niños, cuya edad de presentación habitual es entre los 13 y los 14 años y desaparece 1 a 2 años después.

Se presenta con relativa frecuencia, dependiendo de las edades de los hombres estudiados y de la causa responsable. Se ha estimado que afecta aproximadamente al 60 % de los hombres cuyas edades oscilan entre los 50 y los 70 años.

El cuadro clínico es simplemente un aumento del tamaño de las glándulas mamarias sin acompañarse de algún otro síntoma, salvo que dicho aumento sea considerable y se produzca rápidamente ocasionado una molestia o dolor en la mama.

Causas

- Fisiológicas: En el período neonatal, por influencia de los estrógenos producidos por la madre y la placenta, desapareciendo espontáneamente en las semanas siguientes; en la pubertad, por aumento de los niveles de estrógenos asociado al incremento de la testosterona; y en la vejez.

- Patológicas: Por deficiente producción de testosterona, por traumatismos, inflamaciones o tumores testiculares y enfermedades congénitas (ausencia de testículos y síndrome de Klinefelter entre otras)

- Por elevada producción de estrógenos: a nivel testicular por tumores productores de estrógenos, carcinoma de pulmón que también produzca estrógenos, hermafroditismo, insuficiencia hepática y desnutrición.

- Por medicamentos: Muchos medicamentos son capaces de producir una ginecomastia como efecto secundario por distintos mecanismos, como el ketoconazol, espironolactona (que disminuyen la acción de la testosterona), anticonceptivos o estrógenos por efecto estrogénico directo; clomifeno, gonadotrofinas o andrógenos que aumentan la producción de estrógenos.

- Otros: isoniazida, reserprina, etionamida, metoclopramida, alcohol, heroína, marihuana, etc.

Tratamiento

En las ginecomastias fisiológicas generalmente no se requiere de ningún tratamiento, como por ejemplo en la ginecomastia de la pubertad que en un par de años desaparece en forma espontánea. Si luego de tres años no se observa ninguna remisión pueden utilizarse medicamentos de tipo andrógenos débiles como el danazol o los antiestrógenos como el tamoxifeno o el clomifeno.

La resolución quirúrgica queda reservada para aquellos casos en que el cuadro acarrea trastornos psicológicos o cuando el tratamiento con medicamentos ha fracasado.

Es importante recalcar que es un cuadro benigno y que mayoritariamente se resuelve espontáneamente, no necesitando de ninguna acción terapéutica.

La toma de algún medicamento puede ser la causa; de ser así se suspenderá la toma, revirtiéndose la ginecomastia.

Fuente : Internet