Hernia Inguinal
La hernia inguinal es cuando una sección del intestino sobresale a través de una zona débil de la pared abdominal, y se forma una masa blanda debajo de la piel donde se ha producido la hernia. La hernia inguinal afecta al área de la ingle, cuando la sección del intestino penetra a través de un punto débil en el canal inguinal (una abertura de forma triangular entre las capas del músculo abdominal cercanas a la ingle).
A medida que un feto varón crece y madura durante el embarazo, los testículos se desarrollan en el abdomen y después se desplazan al escroto a través de una zona llamada el canal inguinal. Poco después que el bebé ha nacido, el canal inguinal se cierra, impidiendo que los testículos regresen de nuevo al abdomen.
Si esta zona no se cierra completamente, un tramo de intestino puede moverse al interior del canal inguinal a través de la zona debilitada de la pared abdominal inferior, causando una hernia. Aunque las niñas no tienen testículos, sí tienen canal inguinal, así que también pueden desarrollar hernias en esta zona.
La obesidad, el embarazo, levantar mucho peso y hacer esfuerzos para defecar pueden ser causas de hernias inguinales.
Los siguientes son los síntomas más comunes de la hernia inguinal, pero cada individuo puede experimentarlos de una forma diferente. Los síntomas suelen ser:
Bulto en el área de la ingle, cerca del muslo. Dolor en el área de la ingle. Obstrucción parcial o completa del intestino (en los casos más graves).
Los procedimientos para el diagnóstico de la hernia inguinal:
Exámenes de sangre y Rayos X - examen de diagnóstico que utiliza rayos invisibles de energía electromagnética para producir imágenes de los tejidos internos, los huesos y los órganos.
El tratamiento específico de la hernia inguinal será determinado por su médico:
Su edad, su estado general de salud y su historia médica. Qué tan avanzada está la condición. Su tolerancia a determinados medicamentos, procedimientos o terapias. Sus expectativas para la trayectoria de la condición. Su opinión o preferencia.
El tratamiento principal de la hernia inguinal es un procedimiento quirúrgico conocido como herniorrafia. En este procedimiento, se repara la abertura en la pared muscular.
Si el intestino que sobresale se retuerce o si las heces quedan atrapadas, puede ser necesario realizar una resección intestinal. En este procedimiento, se extirpa parte del intestino.
Es muy frecuente la intervención quirúrgica reparadora en Escolares, Adolescentes y Adultos jóvenes, aunque puede ser necesaria a cualquier edad, incluso en edades extremas de la vida.
Una vez hecho el diagnóstico se debe plantear el tratamiento quirúrgico puesto que las hernias inguinales no se resuelven nunca espontáneamente y la idea es precisamente evitar las complicaciones.
La reparación quirúrgica de esta patología es relativamente rápida, generalmente de bajo riesgo, y el chance de que vuelva a aparecer la hernia una vez corregida es pequeño. Por lo tanto, no hay que tenerle miedo a esta enfermedad sino consultar a tiempo si se presentan signos o síntomas sugestivos de la misma.
Fuente : Hispagimnasios.com