Ejercicio en casa
Se ha preguntado si hay otra opción diferente al gimnasio para practicar algún ejercicio que le ayude a mejorar su figura y su condición física, sobre todo cuando es una persona que vive sola y entre su trabajo en la oficina y las labores del hogar, no queda tiempo para pensar en su acondicionamiento físico.. Bueno, sólo se trata de tener un poco de imaginación al asunto y verá que cuando menos se lo imagine, estará haciendo las más variadas rutinas de ejercicio en su casa.
Podra asegurarse que si por cuestiones de tiempo no puede hacer el mínimo de tres visitas al gimnasio a la semana, entonces un poco de ejercicio “doméstico” le ayudará a no perder la condición y a manteneree activo.
Claves para un buen programa de entrenamiento:
En un buen programa de entrenamiento no deben faltar: ejercio aeróbico, resistencia, flexibilidad y fuerza.
-Los ejercicios de tipo aeróbico son, por ejemplo, correr y montar en bicicleta.
-El trabajo de resistencia ayuda a prevenir lesiones, mejora la postura, endurece y define los músculos, además es fantástico para liberar tensiones del cuerpo.
-La flexibilidad debe ejercitarse antes y después del entrenamiento habitual, a modo de calentamiento al principio y de relajación al final.
-El trabajo de fuerza tonifica el cuerpo y lo mantiene vigoroso.
Consejos prácticos
1.No se olvide de la alimentación, ya que no importa que haga mucho ejercicio si su dieta es rica en grasas saturadas y azúcares. El éxito de programa del entrenamiento dependerá del equilibrio entre ejercicios y alimentación.
2.Lo más importante es la constancia.
3.Los aparatos que puede tener en casa y que son imprescindibles para el trabajo físico habitual son: bicicleta estática y pesas. Además los puede utilizar a cualquier edad, aunque es recomendable que las personas poco acostumbradas a hacer gimnasia tengan alguna supervisión periódica de un médico u entrenador personal.
4.Hay que hacer ejercicio periódicamente: lo ideal es hacer gimnasia cardiovascular al levantarse, incluso antes de desayunar, porque los depósitos de glucógeno son bajos y es cuando eliminamos más grasa corporal. Y las endorfinas - conocidas como hormonas de la felicidad - que se liberan al hacer ejercicio, permanecen en el cuerpo durante toda la mañana, no obstante hacer la rutina de ejercicios por la noche, antes de acostarse también, es muy beneficioso, porque sus efectos posteriores impiden que mientras dormimos el metabolismo se aletargue y se acumulen los depósitos de grasa.
Fuente : www.esmas.com