Ejercite su belleza

Si las palabras ejercicio, gimnasio y esfuerzo la dejan sin respiración y completamente agotada nada más de escucharlas. Destierre de su mente esa absurda idea que asocia directamente el deporte a un despiadado, feroz método de tortura y pongase en forma.

Los beneficios del ejercicio sobre su cuerpo son muchos y muy efectivos. Conseguir que pierda peso no es, ni mucho menos, su finalidad última. Al activar su organismo, logrará descansar como un angelito, dar la bienvenida al nuevo día cargada de optimismo y, por si esto fuera poco, pasar el resto de la jornada inmersa en una descomunal alegría. Deje de mirarlo como un castigo que va a dejarla exhausta y prepárase para ir al gimnasio.

Dulces y reparadores sueños

Las temidas noches de insomnio e intranquilidad pasarán mucho antes de lo que piensa a la historia en cuanto ejercite su cuerpo. Olvídase de los somníferos, pues suelen tener importantes efectos secundarios. Descargue toda la tensión que se acumula en su interior día a día con sencillos ejercicios de aeróbic o gimnasia de mantenimiento y... felices sueños.

Mientras practica deporte, su mente se relaja y el nivel de estrés disminuye, eliminando así las principales barreras que le impedían, o al menos dificultaban, conciliar el sueño. Practique de media hora a una hora, dese una buena ducha al finalizar los ejercicios y acuestese cómodamente en su lecho. Le aseguramos que antes de que se de cuenta, habrá pasado la frontera que le separaba del mundo de los sueños.  

¡Buenos días!

El tantas veces odiado ring, ring del reloj le sonará, después de haber hecho ejercicio, a verdadera música celestial. Sin pensarlo dos veces, dará un salto a una mañana que la sorprendera por su fantástico, radiante estado de ánimo. Al dar los buenos días, su voz reflejará un ímpetu sin precedentes...

La operación es realmente sencilla: cuerpo sano más sueño reparador igual a rostro radiante, resplandeciente, alegre, sin rastro de ojeras ni de otros signos inequívocos de malestar. Para levantarse fresca como las rosas después de ser regadas por cristalinas gotas de rocío, pongase en forma. El ejercicio y la ingesta de agua ayudan a oxigenar e hidratar su organismo, eliminado las toxinas que le afectan de forma negativa. De esta forma, su cutis se regenera sin necesidad de utilizar mascarillas exfoliantes e hidratantes.

Alegría y bienestar

Se siente muchísimo mejor; su cuerpo flota como el de una libélula, su reflejo en el espejo muestra una faz radiante y... no puedes parar de sonreír. Aunque le parezca increíble, el ejercicio puede llegar a cambiar su estado de ánimo de forma considerable. La actividad física ejerce una gran influencia en la psicología de quien la practica, que suele actuar de una forma mucho más equilibrada y optimista que las personas menos activas.

Cuerpo sano, mente sana, despierta, animada y... ¡tremendamente feliz! Salte de es cómodo sillón en el que está a punto de oxidarse y muévase. Apúntese a un gimnasio o acondicione un lugar de su casa. Organícese como pueda o como quiera, pero, pase lo que pase, no deje de ejercitar su cuerpo.  

Fuente : Mujerweb