Cómo hacer ejercicio mientras limpia
- Para ir a la comprar al mercado utilice el carrito (mejor de 4 ruedas); si tiene que cargar con las bolsas, reparta el peso entre los dos brazos y no lleve más de 2 kilos en cada uno.
- Para cargar en brazos a los niños agáchese primero sin doblar la espalda.
- Use recogedores, escobas que no la obliguen a inclinarse.
- Haga lo mismo con la aspiradora; si tiene que pasarla por debajo de un mueble, apoye una rodilla en el suelo.
- Al limpiar cristales cambie de brazo de vez en cuando y en lugar de estirarse o ponerse de puntillas, use una escalera.
- Para meter las sábanas de las camas flexione las rodillas. Sepárelas si están pegadas a la pared, no se tire sobre el colchón.
En un gimnasio no suelen hacerse tantos y tan variados ejercicios en una sola sesión, cuide su cuerpo y su estado físico.
Limpie y entrene a la vez
Para convertir las tareas del hogar en un ejercicio saludable y de fortalecimiento, lo más importante es adoptar una postura correcta siempre y realizar pequeños descansos de 2 a 5 minutos entre ellas.
Pensemos que los deportistas se entrenan específicamente para realizar esfuerzos físicos, tienen períodos de recuperación, masajes, llevan una alimentación adecuada, es decir, todo lo que no se da en la casa. Y es una pena porque este esfuerzo quema todas estas calorías por minuto y kilo de peso:
- Lavar a mano: 3,1 Kcal - Tender las camas: 3,4 Kcal - Limpiar ventanas: 3,7 Kcal - Planchar: 4,2 Kcal
Todo ello lo podemos aprovechar para adelgazar combinándolo con una dieta adecuada.
Para convertir su casa en el mejor gimnasio y sus tareas en la mejor sesión de ejercicio, sigua estos consejos:
- Procure que la vajilla y los utensilios diarios estén a mano. No coloque los platos u ollas más pesados en los lugares más bajos.
- Para planchar, mantega un pie en alto (apóyelo en un escalón) y siéntese de vez en cuando.
La casa está llena de pequeñas trampas para la anatomía. Las malas posturas de las tareas domésticas acarrean muchas molestias. Ya que no puede evitar hacerlas, siga algunos trucos para ahorrarse el cansancio y de paso aprovéchela para ponerse en forma.
Tener actividad física es muy bueno, pero las tareas del hogar no siempre son el mejor deporte. La mayor parte suponen más esfuerzo y sobrecarga que ejercicio, sobre todo porque no se hacen bien.
Los problemas más frecuentes que produce el oficio de la casa son dolores lumbares, del hombro, daño en codos, rodillas y muñecas, mala circulación de las piernas, etc. Lo más peligroso es barrer, pasar la aspiradora, coser, hacer las camas, planchar, cargar las compras, lavar a mano la ropa... casi todo.
Los trabajos de fin de semana también corren sus peligros: mecánica, jardinería... hay que estar muy entrenado para hacer tantos giros, flexiones y extensiones.
Fuente : Saludmania