Los niños sufren tres veces más los daños solares
Los niños reciben tres veces más la radiación ultravioleta del sol que los adultos. La escasez de melanina, de sudor y de sebo de los pequeños hace que el sol sea más peligroso para ellos, por lo que hay que aplicarles protectores de factor 15 como mínimo.
Y no sólo debemos protegerlos del sol en la playa, sino siempre que estén al aire libre, incluso a la sombra y en días nublados, ya que el sol produce reflexiones en la arena y los rayos atraviesan las nubes.
Cómo aplicar bien las cremas solares
El uso de protectores solares de factor 15 o superior en los niños reduce el riesgo de cáncer en un 78 por ciento. Estas cremas deben aplicarse en cantidades abundantes, media hora antes de exponerse al sol y con la piel seca. Cada dos horas es recomendable volver aplicar la crema protectora. Además, hay que evitar la exposición en las horas de máxima intensidad solar (12 a 16 horas).
Aunque algunas personas usa protectores solares, la mayoría los emplea de forma incorrecta: cantidades que se aplican; uniformidad con la que se hace; no se suelen aplicar en zonas "delicadas".
Volviendo a los niños, se recomienda no exponer a los menores de tres años a los rayos solares, así como proteger a todos los pequeños con gorros, camisetas y gafas de sol, además de darles agua para que no se deshidraten.
Además, debe educar a sus hijos sobre la protección solar para que desarrollen hábitos saludables en el futuro.
Fuente : Saludmania