Abedúl
El abedúl pertenece a las betuláceas. Se utilizan las hojas tiernas y la corteza y deben recolectarse a finales de primavera o en verano. Sus componentes son taninos, amargos, aceite esencial, flavonoides, glucósidos y saponinas, y con respecto a sus propiedades puede mencionarse que tiene efectos diuréticos, antisépticos y tónicos.
La utilización de las hojas se recomienda en diversas dolencias del aparato urinario, específicamente para el tratamiento de la cistitis. Además, se puede utilizar para eliminar el exceso de agua en el cuerpo, de ahí que sea considerado como diurético.
En estos casos de afecciones urinarias, el abedúl puede utilizarse en combinación con otras plantas como la gayuba.
Esta propiedad diurética también es purificadora, por lo que el uso de esta planta se ha extendido a contrarrestar casos de gota, dolores artríticos leves y reumatismo, sobre todo cuando éste está en sus primeras etapas.
Por su parte, la corteza puede curar los dolores musculares. Para ello, debe aplicarse externamente la corteza, de forma que la parte interior fresca y húmeda quede en contacto directo con la piel de la zona afectada. También, es posible combinarlo con otras plantas para tratarlos, particularmente funciona de maravilla cuando se mezcla con el sauce negro.
Para preparar la infusión del abedúl se vierte una taza de agua hirviendo sobre una o dos cuhcaraditas de hojas secas y se deja reposar durante diez minutos. La dosis recomendada es de una taza tres veces al día. Si es tintura entonces se toma uno o dos mililitros tres veces al día.
Fuente : Internet