El melón y la sandía
Conocemos muchas clases de melones y sandías, pero todos tienen un potencial energético tanto para niños como para adultos. La dulzura y frescura de sus sabores hacen que sea disfrutado por todo el mundo. Se pueden preparar muchas bebidas con el jugo de sandía y con los melones se preparan sanos alimentos que acompañados con otros ingredientes hacen una delicia para el paladar.
Melón
Contiene vitamina A, B, C además de ser rico en minerales. Su sabor produce una sensación de frescura y es bien asimilado cuidando de no mezclar esta fruta con verduras en las comidas.
Su poder curativo se extiende a casos de:
Reumatismo, gota, obesidad, hemorroides, cefaleas, acumulación de ácido úrico, artritis, intoxicaciones, acné, tifus.
El jugo de melón es muy bueno para aquellos niños que padecen afecciones pulmonares o necesitan fortalecer su sistema respiratorio. Se puede mezclar con un poquito de azúcar y beber diariamente.
Las personas con problemas de estreñimiento y de riñones deben evitar esta fruta por no ser fácil de digerir para ellos. Es importante que se mastique bien antes de digerir.
Sandía
Es una sana fruta diurética, contiene vitaminas A, B, C, y otros oligoelementos. La sandía, al igual que el melón es refrescante en verano y da una sensación de bienestar general.
Por tener alto contenido de sales minerales calma la sed y aporta a la sangre sus propiedades depurativas, se neutralizan los humores y ayuda a renovar las capacidades glandulares. Es estimulante del apetito y los niños disfrutan al igual que los mayores.
Fuente : Internet