Propiedades del Eucalipto
En general, se emplea para curar afecciones pulmonares y enfermedades afines, como los catarros y los ataques de asma. Existen dos modalidades básicas para aprovechar las propiedades curativas de esta planta: en infusión o en inhalaciones.
Para la primera se utilizan las hojas en una proporción de dos por taza y se toma tres veces por día, para la segunda, se coloca un puñado de hojas dentro de una olla grande con agua hirviendo, se pone la olla en un banco, con la olla tapada.
El enfermo se sienta con el torso desnudo en otro banco cercano al primero. Se coloca una cobija sobre el enfermo de tal manera que se tape él y la olla, después se descubre el recipiente para que el vapor curativo pueda ser aspirado por éste.
Se debe descubrir lentamente el recipiente de agua caliente, pero no debe dejarse escapar el vapor. El agua vaporizada debe bañar completamente el pecho y la cabeza del enfermo.
Este procedimiento debe prolongarse entre 10 y 30 minutos y se recomienda utilizar alguna especie de hornilla o algo que caliente la olla para que el calor sea constante hasta que se volatilice el líquido. Después se seca el sudor con un trapo humedecido con agua fría.
La sustancia que se encuentra especialmente en esta planta es el eucaliptol, que tiene propiedades espectorantes y antiinflamatorias, también contiene taninos, resina y ácidos grasos.