Cómo mantener una actitud positiva...
Hoy en día, leemos y escuchamos mucho acerca de la palabra actitud, relacionada con la posibilidad de alcanzar nuestras metas, el éxito y la prosperidad. Pero, más que la actitud es la posición con la que afrontamos y respondemos a cada situación en la vida.
La actitud involucra los pensamientos y las creencias que tenemos acerca de nosotros mismos y acerca de las situaciones que vivimos. La actitud positiva es básicamente la confianza que tenemos en nosotros mismos y la capacidad que poseemos para resolver cada una de las situaciones que se presentan en nuestra vida de una manera satisfactoria. La actitud influye y afecta directamente nuestro estado de ánimo, nuestras acciones, nuestra salud y, finalmente, nuestra calidad de vida y felicidad.
La actitud negativa o positiva que tenemos ante la vida depende en gran parte de las programaciones que grabamos a través de la infancia, por ejemplo: si crecimos rodeados de personas que se quejaban y lamentaban de su situación sin hacer nada para mejorarla o si crecimos escuchando frases como: “tú no puedes", "no lo hagas porque te va a ir mal", "no tienes suerte", seguramente tendremos una actitud negativa frente a la vida.
En cambio, si tuvo una o varias personas que lo estimularon a confiar en usted mismo y en la vida, reforzando sus capacidades y apoyando en cuanto a superar con optimismo momentos difíciles, tendrá una actitud positiva. Usted puede generar una actitud positiva ante la vida, si sigue una serie de principios básicos que le ayudarán a lograrlo.
El primero invita a pensar que no debe juzgar el día por el clima porque terminara creyendo que su vida es incolora y totalmente negativa; de ahí la importancia de establecer un cambio mental que le de opciones de crecer personalmente.
El segundo es cambiar la manera de empezar el día para que surja en usted una actitud mejor, una actitud abierta. Una vez que ha decidido empezar el día en forma positiva, no permita que aquello que se encuentra fuera de control afecte su actitud e influya en sus decisiones o determine su comportamiento.
Todo lo que entra en su mente a través de los sentidos, ya sea de manera consciente o inconsciente, queda grabado en ella para siempre. Toda acción esta precedida por un pensamiento y a su vez todo pensamiento es el resultado de aquello que entra y encuentra cabida en nuestra mente. Por esta razón, si logra controlar aquello que entra a su mente, ya sea a través de lo que lee, lo que escucha a través de la radio, o lo que ve en la televisión, podra controlar sus pensamientos y por ende, todas sus acciones.
Los pensamientos que alberga en su mente no sólo afectan el estado de ánimo, acciones y planes, sino que también provoca respuestas en el cuerpo. De la misma manera, sus pensamientos tienen la habilidad de provocar emociones y estados mentales específicos. Pensamientos positivos provocan emociones, sentimientos y acciones positivas.
Pensamientos como la alegría, el amor, la autoestima, un sentido de saber hacia donde vamos, traen como resultado entusiasmo, energía, dinamismo, paz interior. De otro lado, los pensamientos negativos como el resentimiento o el miedo, producen resultados negativos como la tensión, la ansiedad, la fatiga y otra serie de sentimientos y emociones que no nos permiten avanzar.
Comience a prestar más atención al tipo de información que permite que llegue a su mente y reemplaza la negativa con aquella que le ayude a desarrollar una visión positiva del mundo, a afianzar las cualidades triunfadoras que ya existen dentro de usted, para que pueda hacer de su mente subconsciente su mejor aliada en el camino hacia la realización de sus sueños. ¡Es su decisión el querer ser una persona positiva con ánimo a cambiar...!
Fuente : Yupimsn