Lenguaje de los gestos: hablan las manos
Con las manos comunicamos infinidad de sentimientos y de emociones: aplaudimos, cuando estamos satisfechos; nos las frotamos cuando intuimos un éxito; nos las ponemos delante de la boca cuando decimos una mentira...
Un apretón de manos dice mucho de las personas que lo dan. En una entrevista de trabajo es uno de los factores que debe tener en cuenta para causar buena impresión. Pero no se trate únicamente de evitar dar a su posible jefe una mano insegura y sudorosa. ¿Quiere saber cuál es la actitud que reflejan sus manos?.
-Si ofrece su mano con la palma hacia abajo, estará obligando a que la mano de su interlocutor se sitúe justamente debajo. En este caso ofrece una imagen de dominación y de control, afirman los especialistas.
En cambio, si ofrece la mano con la palma hacia arriba, se interpretará que ofrece el control a su interlocutor. Se intuye una cierta actitud de sumisión.
-El tercer caso supone realizar un apretón de manos vertical que supone una cierta simetría. Esta es la forma de encajar las manos que refleja un sentimiento de simpatia.
La fortaleza y el ímpetu a la hora de apretar la mano de un interlocutor también debe valorarse. Una excesiva debilidad supone inseguridad, mientras que oprimir con demasiada fuerza expresa agresividad.
Las manos dicen mucho más:
-Tapar la boca con la mano es un indicio que descubre al mentiroso. Normalmente se usa este gesto inconscientemente para acallar las falsedades que salen de nuestra boca.
-Frotarse o juguetear con la oreja denota una falta de atención o de interés en lo que se está diciendo.
-Apoyar la cabeza sobre la mano es un gesto típico de aburrimiento y de falta de interés.
-Apoyar la barbilla sobre el puño denota inseguridad.
-Mordisquear el dedo anular o índice mientras se apoya la cabeza en la palma de la mano es aún un signo mucho más evidente de inseguridad.
-Frotarse las manos induce a pensar que las expectativas que se nos ofrecen en un futuro inmediato son muy agradables. Intuimos el éxito y lo manifestamos así.
-Cruzar las manos por delante con los dedos entrecruzados es una actitud que refleja frustración o desengaño.
Aveces cuando damos la mano a alguien no sabemos o nos damos cuenta de lo que estamos transmitiendo a la otra persona, por eso es importante saber un poco más acerca de esto y tratar siempre de saludar con una mano amiga.
Fuente : Mujerweb