El 20% de niños y jóvenes tendrá algún problema psiquiátrico

El 20 por ciento de la población infantil y juvenil va a padecer un problema psiquiátrico en algún momento de su vida, y los trastornos más habituales son los del comportamiento, los psicóticos y las enfermedades psicosomáticas, han señalado algunos Psiquiatras.

Para la resolución definitiva de estos problemas es necesario un diagnóstico y tratamiento precoces, y para ello es decisiva la colaboración de los padres. Los especialistas han afirmado que "todavía existe cierto rechazo por parte de los padres a consultar al médico acerca de la posibilidad de que su hijo tenga algún problema psiquiátrico. Ante ciertos cambios conductuales en el niño o el adolescente deben acudir al pediatra o al psiquiatra infantil".

Los signos de alerta en niños pequeños (menores de 12 años) son variaciones en el carácter y actividad diaria del niño (disminuye los juegos y la comunicación con otros niños), tristeza, irritabilidad, miedos no fundamentados, y cambios en la comida y el sueño sin causa aparente, entre otros. En adolescentes se añaden a estas manifestaciones un sentido del ridículo exagerado y reducción del rendimiento escolar.

Tratamiento

En esa población las psicopatías más frecuentes son los trastornos de conducta y el déficit de atención e hiperactividad. En segundo lugar se encuentran los trastornos de ansiedad. Su tratamiento se asienta en tres pilares básicos: la psicoterapia del niño, la terapia farmacológica y el asesoramiento a los padres, todo ello sin olvidar el papel del colegio.

La elevada prevalencia de estas afecciones se explica por la mayor detección que existe en la actualidad, debido a la disponibilidad de más medios para su diagnóstico y tratamiento, y también a condicionantes medioambientales. "Debemos tener presentes las condiciones sociales, que harán que los problemas psiquiátricos emerjan cuando sean favorables, como sucede con la anorexia", afirman los especialistas.

Influjo social

Los cambios sociales y culturales son, según los expertos, la principal explicación del claro aumento que han experimentado en las últimas décadas la depresión, los trastornos de la alimentación y los del comportamiento. Además, "si pensamos en los trastornos de conducta y de la alimentación observamos que el tipo de valores de una sociedad también influye en las patologías que sufre esa población".

También ha destacado la influencia que ejerce el medio en el que se mueve el enfermo para la evolución de su proceso. "Si un niño está en un ambiente hostil durante años es difícil que mejore, como tampoco lo hará un paciente con trastornos de la alimentación que viva en un entorno donde imperen los valores del cuerpo y la imagen".

Sobre la base genética de estas afecciones, los psiquiatras han matizado que varía según el proceso, de forma que la genética puede ser el origen de un 15 por ciento de algunas psicopatías mientras que en otras puede suponer el 40 por ciento. Pese a todo, "no hay que olvidar la interrelación entre la susceptibilidad genética y la influencia ambiental".

En cuanto a los factores pronósticos han señalado la edad a la que aparece la enfermedad, el momento del diagnóstico y tratamiento y el medio en el que vive el enfermo.

Fuente : Ondasalud