Parasomnias
Bajo el término parasomnias se encierran las alteraciones presentes durante el sueño. En este grupo está el sonambulismo, los terrores nocturnos, las pesadillas, el síndrome de piernas inquietas y los calambres nocturnos.
Los calambres nocturnos en las piernas
Lo sufren las personas de edad avanzada, aunque no se puede decir que sea raro en las personas menores de 60 años. Generalmente se trata de personas relativamente sanas que consultan al médico por la incomodidad que tienen durante la noche al sufrir dolores de tipo calambres en las pantorrillas.
Estos músculos se contraen y causan la flexión forzada del pie o de los dedos de éste. En muchos casos, los calambres se repiten en el transcurso de la noche impidiendo que el enfermo descanse adecuadamente. El médico generalmente no tiene una herramienta de laboratorio que le permita confirmar su diagnóstico, aparte de lo que le refiere el enfermo.
En estos casos él recomienda estirar rápidamente el dedo o el pie cuando se presenta el calambre, así evita que éste se extienda y el síntoma molesto se detiene. Los suplementos de calcio son recomendados por algunos médicos, sin embargo, su eficacia no está completamente demostrada.
Otros médicos sugerirán a sus paciente que aumenten el consumo de alimentos ricos en potasio, como el banano, la papaya, el melón, etc.
Los terrores nocturnos
Son aquellos episodios de intensa agitación y gritos durante el sueño, más a menudo observado en los niños. En los adultos se encuentran relacionados con el alcoholismo o desórdenes de tipo psicológico. Generalmente el médico sugerirá al enfermo iniciar un programa de ayuda psicológica y le recomendará tomar medicamentos ansiolíticos de acción intermedia como el diazepam 2 a 5 mg antes de acostarse.
El síndrome de piernas inquietas
Observado frecuentemente en personas mayores de 55 años quienes manifiestan una sensación incómoda en las piernas, de difícil descripción, que los obliga a moverlas constantemente ya que con dicha acción cede transitoriamente la molestia. El síntoma se describe muchas veces como "un destemplamiento" o como dolor de baja intensidad pero que impide mantener las piernas en reposo. No es descrito como calambre. Este continuo movimiento impide al paciente conciliar o mantener satisfactoriamente el sueño.
El sonambulismo
El paciente se sienta, camina, realiza actividades complejas (como tocar guitarra, por ejemplo) durante el sueño que no recuerda el día siguiente. Es de anotar que todas éstos movimientos los ejecuta con los ojos abiertos. El médico le recomienda a los familiares que deben proteger al paciente porque podría lesionarse durante los episodios de sonambulismo. Generalmente este trastorno aparece durante la adolescencia o en la infancia tardía.
Las pesadillas
O sueños con trama terrorífica se presentan en adultos con un trastorno de base emocional o en los niños. Cuando estos episodios son recurrentes el médico considerará una evaluación psicológica, ya que los sucesos pueden ser la manifestación de un desorden mucho más complejo. En los adultos es frecuente verlos relacionados con una excesiva y frecuente toma de alcohol o con la fatiga física y/o emocional. El tratamiento está dirigido a controlar el factor emocional subyacente y puede requerir la toma de medicamentos.
Fuente : Mimedico.net